Hace más de veinte años el presidente de Toyota Motor Corporation, Eiji Toyoda, manifestó su deseo de construir "el mejor coche de lujo del mundo". Seis años después nacía el Lexus LS 400, y los especialistas dijeron enseguida que probablemente Eiji Toyoda se había dado el gusto. En el pasado Salón de Detroit la marca de lujo del Grupo Toyota acaba de presentar el modelo LS 460, muy distinto de aquel primer intento exitoso y mucho más sofisticado. Por supuesto, el auto es más alto y más ancho que su predecesor y es el primer Lexus que se ofrece con carrocería corta o larga. Impulsado por un V8 de 4,6 litros con sistema de alimentación mixto (inyección directa e indirecta) que desarrolla 380 caballos, el auto posee una elasticidad y una suavidad de marcha envidiables, acorde con el interior fastuoso que, como bien se ha dicho, lo hace ser lo más parecido a un jet privado. Pero todo es sorprendente en el nuevo Lexus; siendo un vehículo de más de cinco metros de largo necesita apenas 10,8 metros para girar en U, caja automática de ocho marchas, diez airbags, aparcamiento mediante pantalla táctil, más todos los sistemas de control de carril, frenado, estabilidad, etc. que uno pueda imaginarse. ¿El precio? No fue comunicado oficialmente, pero se sabe que superará los 100.000 euros.