El diseño clásico americano no parece pasar nunca de moda. A la actualización del Mustang y del Corvette se suma ahora este Dodge Challenger que comenzará a producirse en 2008 en la planta que el grupo Chrysler posee en Brampton, cerca de Toronto, compartiendo la plataforma con el Chrysler 300C, el Dodge Charger y el Dodge Magnum. La aparición de este tipo de vehículos siempre divide los comentarios entre quienes reniegan de las renovaciones sobre diseños algo vetustos y piden más imaginación y quienes defienden la permanencia de, en este caso, los autos musculosos, agresivos, "machotes", como se los llama en ciertas latitudes, porque en la oferta del mercado no pueden estar ausentes. Por supuesto, este Dodge Challenger no va a ser la excepción.