La Marquise, de De Dion-Bouton et Trepardoux


Es el auto que funcione más antiguo del mundo. Fue construido por la empresa francesa De Dion-Bouton et Trepardoux en 1884, con propulsión a vapor, y será rematado en California a un precio que se estima entre 1,5 y 2 millones de dólares. Como combustible emplea carbón, papel y madera, y originariamente fue capaz de desplazarse a 60 km/h. Vía Clarín. Hay un vídeo interesante en Gooding & Company.