Luego de los recordados episodios que la F1 generó en el circuito norteamericano, es posible que a partir de 2008 se cambie el sentido de giro en Indianápolis. La piedra del escándalo es la famosa curva 13, la del paredón que bordea la pista, que desde hace seis años es cuestionada por los pilotos, quienes, en definitiva, temporada tras temporada, son los que tienen que afrontarla. Vía Autoblog en español.